La ermita de Santa Lucía, es una de esas joyitas bien escondidas que nos guarda nuestro patrimonio. A un kilómetro de Ayerbe, y tres desde Fontellas, se puede acercar uno a esta pequeña ermita románica.
Afortunadamente se encuentra bien señalizada, porque sino sería algo costoso encontrarla si no se ha estado antes allí.
Prácticamente en medio de unos campos de cereales, con unas oliveras en la retaguardia, ha aguantado el paso de los años, aunque su efecto se ve sobre todo en la techumbre de la edificación.
Con un breve paseo desde Ayerbe se puede disfrutar de esta pequeña ermita dedicada a Santa Lucía.