Escuaín es un pequeño lugar situado en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. En invierno no habita nadie, pero en verano la vida vuelve a varias de sus casas.
Cuando lo visité un gato royo nos dió la bienvenida. Y si hay gatos, hay vida.
Casas reconstruidas de manera tradicional.
A los pies del Castillo Mayor.
Sitio peculiar, a la vez que bonito. Carretera sinuosa de aproximación, por la que hay que conducir con cuidado, pero el paisaje vale la pena.
En la entrada del pueblo nos encontramos con una oficina del parque, abierta al público, donde atentamente informan sobre excursiones y lugares a visitar en la zona.
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